Tengo todavía algún amigo al que no le da vergüenza decir que votó a Rubalcaba porque su buen corazón de izquierdas así se lo aconsejó, porque solidario con los pobres, los proletarios, esa era la única papeleta válida para las auténticas personas buenas. Así me lo cuenta en la calle Cervantes mientras pasan cientos de personas camino de la Cibeles, aderezados con la camiseta verde de los huelguistas por la educación pública. Se van a manifestar y mi amigo con ellos. En un momento de la conversación los señala con cariño y dice: – «Mira Manuel, todos son gente buena y solidaria que lucha contra los mercados, los banqueros, la injusticia y el fascismo que representa el Partido Popular»-.
Pero a mi las palabras de mi amigo no me dan otras cosa que ganas de llorar. Pienso que es una vergüenza que miles de profesionales se calcen la camiseta verde de la huelga de la enseñanza bajo el lema de la calidad de la enseñanza pública. Por la auténtica, y necesaria, calidad de la enseñanza estos votantes del PSOE, sindicalistas y amigos estudiantes revolucionarios que ondean en las calles la bandera republicana, deberían haberse manifestado en contra de la LOGSE que paradójicamente elaboró el hoy líder de los socialistas, el señor Rubalcaba, cuando fue ministro de educación con Felipe González.
Porque una cosa es la política de andar por casa y en eso los españoles tenemos la mala suerte de soportar a unos políticos nefastos que no están a la altura de las circunstancias, y otra, muy diferente, es utilizar los conceptos vitales, como el de la calidad de la enseñanza, para realizar esa politiquería barriobajera. Y se lo digo a mi amigo que al final me reconoce que todo es un pretexto, y que las verdaderas motivaciones de tanta gente vestidita de verde, son las de la política de bajas miras. Qué pena para tanto esfuerzo.
La paseata 
Es curioso el fanatismo de las bases del PSOE. Suelen estar bastantes más escorados a la izquierda que los aparatos oficiales de su partido. Al menos los pocos que he conocido. Sin embargo a pesar de sus ideas e ideologías, defienden siempre a muerte lo que hace el PSOE, aunque este aplique políticas de derechas como en la legislatura pasada. Yo creo más bien que es un problema de cultura política, de ignorancia sobre alternativas. De bipartidismo enquistado. «¿De que equipo eres, del Real Madrid o del Barcelona?» Si realmente reflexionaran sobre su ideología y lo que hace el partido, las bases huirían despavoridamente hacía otros partidos.
La nostalgia, la vanidad,el amor al poder, son los grandes enemigos de la Izquierda. Estoy totalmente de acuerdo con su artículo. El enorme interés de la Iz. por «adoctrinar» a nuestra juventud.
El otro día estimada Fuensanta vi por televisión las declaraciones de los líderes sindicales del sector de la minería pública de Asturias y León y me llamó la atención la de un ser que decía que van a luchar para que todo vuelva a ser «como antes». !Cómo si él no supiera que desde hace ya veinte años su sector está subvencionado y vive del dinero público! En la minería por tanto desde Felipe González los sindicatos saben que nada va a ser como antes y los sindicalistas luchan digamos por sus salarios subvencionados que tienen los días contados, pero también por los de los vecinos de unas comarcas que históricamente han vivido de sacar el carbón. Pero lo de la educación no tiene nombre o, mejor dicho tiene el nombre de la insensatez sindicalista. Ellos están saliendo a la calle en favor de la oposición política del PSOE y como excusa arguyen la calidad de enseñanza. Esa es su trampa y su pecado.
La educación, otra herramienta más que utilizan los «políticos» para hacer «política». Pero lo que es triste de verdad es que haya gente que defienda todavía esta forma de hacer «política»…
Esa frase cierta estimado Fernando me produce vértigo: La educación nunca debería ser material de uso y abuso del politiqueo. Así nos va.